Cierran Relevo y dinamitan nuestros sueños

Faltan líderes con visión y coraje

Querido periodista:

Recuerdo la clase que nos dio Germán Frassa en noviembre de 2022 en el Máster en Innovación en Periodismo. Germán era subdirector de producto y estrategia de Relevo. Había transcurrido poco más de un mes desde su lanzamiento.

Le escuchábamos absortos mientras nos contaba cómo habían preparado el lanzamiento durante más de un año, desarrollando una potente investigación de usuario y definiendo cuidadosamente el producto. Hicieron miles de encuestas y 50 entrevistas a hombres y mujeres de entre 16 y 55 años. Querían escucharlos, entender su relación con el deporte, descubrir pistas que les permitieran diseñar su identidad visual y desarrollar su estrategia y modelo de negocio.

Lanzaron cuentas en TikTok, Instagram, X y Twitch, con objeto de generar expectación, crear una comunidad de fans del deporte y probar “mínimos productos viables”.

Germán nos fue destripando todo el proceso de gestación, hasta que lograron un producto atractivo e innovador, que insufló aire fresco a la profesión.

“Relevo ha despertado enorme expectación (…) para lograr que el desencanto detectado entre los aficionados se transforme en atracción por informarse a través del nuevo medio”, subrayaba José Luis Rojas, experto en periodismo deportivo.

Reclutaron muchísimo talento entre los 75 periodistas, diseñadores, desarrolladores, videoperiodistas, gestores de redes sociales... que integraban su redacción. Lo que veíamos era espectacular: independencia, compromiso, creatividad… Colaboración entre secciones, apuesta por el periodismo de datos, narrativas buenísimas…

Aquello nos parecía un sueño.

En su web ofrecían dos niveles de lectura; uno para ver titulares, resultados e imágenes-resumen; otro, más reposado, sin apenas hipervínculos ni intromisiones publicitarias, para leer los contenidos en profundidad. En los móviles utilizaban una navegación inspirada en Tiktok, con vídeos en autoplay y sin sonido, de modo que el usuario revisara los temas de un vistazo.

Nos cautivaron con sus coberturas sobre deportes más allá del fútbol y sus enfoques. Visibilizaron el deporte practicado por mujeres y, de modo especial, el fútbol femenino.

Pronto llegaron las exclusivas, entre ellas, el “caso Rubiales”.

Por fin, un medio deportivo rompía muchos tabús con una estrategia sólida y temas bien tratados, sin clickbait, en un mercado tan competitivo.

Construyeron una marca confiable y una comunidad cercana a los dos millones de seguidores en las redes sociales.

Me convertí en lector habitual. Era mi medio para seguir el deporte.

Relevo figura entre los 20 medios más innovadores de España, según el Ranking de Innovación Periodística 2025 de la Universidad Miguel Hernández que publicaremos en breve.

Por todo eso, la noticia del cierre fue un mazazo.

Sabía que en Relevo tenían problemas, que acumulaban millones en pérdidas, pero todavía esperaba un golpe de timón que nunca llegó.

“La necesidad de rentabilidad le ha ganado al deseo de innovar”, sentencia el consultor Mauricio Cabrera.

“Relevo nació quizás demasiado grande. Se suponía que Vocento invertiría de 10 a 12 millones de euros anuales durante 5 años. Pero, aunque los números rojos eran incluso menos rojos de lo que establecía el plan de negocio original, ha sido demasiado para Vocento”, apostilla Mauricio.

Seguramente la plantilla de Relevo estaba sobredimensionada. El plan de cinco años de pérdidas por encima de 10 millones era poco realista. Y Relevo impulsaba un periodismo demasiado romántico, necesitado de mayor retorno y un plan económico más austero. Pero es triste que tus piezas generen eco y prestigio, y que otros competidores las machaquen y obtengan 10 veces más tráfico e ingresos.

No entiendo que los directivos de Vocento echen por tierra todo el trabajo que profesionales tan valiosos han desarrollado durante tres años. Y que hayan roto el compromiso de los dos años que aún faltaban para que Relevo llegara a ser rentable.

Me falta información sobre las claves del cierre de Relevo. No voy a entrar en los cambios en la cúpula de Vocento, pero se han tomado decisiones lamentables.

Mediaset había ofrecido 5 millones por Relevo. El acuerdo implicaba preservar la marca y mantener el 40% de los puestos de trabajo. Pero con el trasfondo de una fusión entre Vocento y Unedisa, esa opción no salió adelante. Mi teoría es que fue vetada para eliminar una incómoda competencia para el Marca.

Esta profesión necesita hoy más que nunca un periodismo que ilusione a las audiencias y que, al mismo tiempo, genere la confianza necesaria para sostenerse financieramente.

Nos faltan directivos con visión y empuje. Que se arremanguen y bajen al barro, asuman los retos y lideren a sus equipos contra viento y marea.

Nos faltan auténticos líderes.

Con el coraje para que un proyecto en el que se ha invertido tanta energía, tanto talento y dedicación, no se tire así por la borda. Si sus “hombres de negro” asumen que la punta de lanza de la innovación en Vocento ha sido un fracaso estrepitoso, ¿qué mensaje están lanzando? ¿Es Relevo el responsable de los 97 millones de pérdidas de 2024 que presentó Vocento el viernes? ¿O es la cabeza de turco?

He hablado con mucha gente de Relevo. Me transmiten su desolación. Seguirán todavía unas semanas, llenos de incertidumbre, buscando ya trabajo en otro sitio, con la rabia de constatar cómo este formidable proyecto termina abruptamente.

Es terrible. Aún estoy en shock.

Un fuerte abrazo a los compañeros y compañeras de Relevo.